Storefront lights, a gentle driver, a future she doesn’t interrogate—introspection at 30 mph.

Luces de escaparate, chofer amable y un futuro que no interroga—introspección a 50 km/h.

A chipped mug, an unsent yes, and the quiet that’s full of her handwriting—longing with the chain still on.

Una taza despostillada, un sí sin enviar y un silencio lleno de su propia letra—anhelo con la cadena puesta.

A tired fence, a quiet site, a river before language. Crossing the line feels less like glory and more like breath returning.

Una malla cansada, un sitio callado, un río antes del idioma. Cruzar la línea se parece menos a gloria que a volver a respirar.

Clouds, ants, a dog that leans; a thought that walks across a meadow before it reaches her. Today, the music is about this.

Nubes, hormigas, un perro que se recarga; un pensamiento que cruza un prado antes de alcanzarla. Hoy la música habla de esto.

A draft, a red scarf, a bike courier, and a ticket stub that turns kindness into a traveling thing.

Corriente de aire, bufanda roja, mensajero en bici y un boleto que vuelve viajera a la amabilidad.

Puddles like mirrors, a saved compliment, and a goodbye shaped for any decade of friendship.

Charcos como espejos, un cumplido guardado y una despedida con forma de amistad de cualquier década.

Test turntable, rain on the bell, and a soul LP with someone’s name in the runout—retail as stewardship.

Tocadiscos de prueba, lluvia en la campanita y un soul con nombre grabado en el runout—comercio como cuidado.

: Knife arithmetic, sage becoming air, and a table set with the good fork—solitude turns into ceremony.

Aritmética del cuchillo, salvia volviéndose aire y mesa con el tenedor bueno—la soledad hecha ceremonia.

No joggers, no photoshoots—just wind through live oaks and a pond holding its breath. Winter grants a small permission to be alone.

Sin corredores ni sesiones de fotos—solo viento entre encinos y un estanque conteniendo el aliento. El invierno da permiso de estar solo.